La provincia de Cuenca dispone de un nuevo sendero de Gran Recorrido, GR 163 Ruta del Cristal de Hispania, que cruza sus bellos y cambiantes paisajes de Norte a Sur, recorriendo las comarcas de la Alcarria, la Mancha Alta y la Mancha Baja.
Recorrer los más de 163 km que atraviesan los extensos valles alcarreños y cruzar las enormes llanuras manchegas es un placer. En el camino se podrá aproximar a las pequeñas localidades que atesoran una rica e interesante cultura, localidades que en su día estuvieron unidas por la importante ruta romana que llevaba el espejuelo o lapis specularis (el de mejor calidad y producción) a distintos puntos del Imperio Romano y que este sendero reproduce en su trazado.
Bellos y desconocidos lugares donde disfrutar de paisaje, cultura y tradición minera que se remonta a época romana y se extiende de norte a sur. La vía comercial abierta daba servicio a minas y complejos mineros, asentamientos militares y poblaciones, hasta conducir el mineral extraído al puerto de Cartagonova.
De Ercávica a San Clemente se podrá seguir el rastro del lapis specularis que se explotó durante los siglos I y II d.C. para la elaboración de ventanas y vidrieras romanas.
El itinerario propuesto discurre por las localidades de Cañaveruelas, Villalba del Rey, Portalrubio de Guadamejud, Moncalvillo de Huete, Huete, Loranca del Campo, Carrascosa del Campo, Olmedilla del Campo, Villas Viejas, El Hito, Villarejo de Fuentes, Villar de Cañas, Alconchel de la Estrella, Villalgordo del Marquesado, Villar de la Encina, Pinarejo, Santa María del Campo Rus y, finalmente, San Clemente.
Sin duda un trazado que merece la pena ser recorrido, apto para senderimo, BTT o caballo. Poblaciones y yacimientos, o cuevas como las de Sanabrio (Saceda del Río, Huete), la Mora Encantada (Torrejoncillo del Rey), Las Obradás (Osa de la Vega) o Pozolacueva (Torralba) nos aguardan en el camino.